cuando la pelota le queda picando
se pone a rascar
hasta que ya mas no le pique
se pone a rascar
hasta que ya mas no le pique
mosquito misógino
doné un litro de sangre
a tu pueblo picante
que gritaban desde los arboles
convocando al diablo mismo
que se venga decía uno
que se vengue decía otro
hasta que bingo gritó un último
desde una nube entonces
apareció el pajarraco inmenso
enardecido y ardiendo
prendido fuego
hecho demonio
directo nomás
se venía pa' mí
el diablo pitufo volador
el lucifer éste
atado a los aires
se me venía nomás a mí
a mí, que hasta la lluvia me puede
cuando anda desafinada
y será que la lluvia sí, pero éste no,
y será que la lluvia sí, pero éste no,
pues no voy a andar regalandomé
así porque sí
al bicho rojo pata'e cabra
me le tiro al suelo
me le escondo al pasto
me le caigo en una flor
que le robo un secreto
me estornuda un misterio
me le oculta del paisaje
que luzbel atravesado
me atraviesa en su periplo
que le arriba a un árbol
mas arriba del árbol
en la copa del árbol
que me copa el árbol
que entre el yuyo yo
que me muevo yo
le recorro yo
que de acá para allá
que le silbo al sol
me le gira al girasol
que leviatán asombrado
que se pende un pétalo
a su sombra infernal
que la madrugada ya se nace
que ya firme me lo enjuicia
y que el diablo se me va preso
y que ni me pienso ya de que
ya lo mas peorcito
es mucho más mejor
que andar vadeando
tanto pantano de a pasitos
cosa'e Mandinga
me digo, me me digo
y me le tiro a dormir
de nuevo al pastito
bajo árbol,
bajo pájaros
y entre mosquitos
y me le tiro a dormir
de nuevo al pastito
bajo árbol,
bajo pájaros
y entre mosquitos