sábado, 30 de junio de 2018

Existen los noticieros, triste noticia

Existen los noticieros
Triste noticia
Pa' quienes supieron de su ausencia
Y murieron de filosofía

Chimichurri a gusto

Pasa poco pero pasa
Que en el concierto ralo de mi aeropuerto
Me cancelaron todos los vuelos
En este mundo hosco donde el fin justifica los medios
Y los miedos justifican los fines
Y con la gambeta puesta en los pieses
Eludiendo a los contrarios deseos
No sé tanto pero huelo a sabiondo
En esto de reptar solo
Yo conmigo y mi presencia
Nosotros que quedamos pésimo en toda embajada del otro
Y más pronto que tarde nos toca arder
No sé qué estoy tratando de hacer con este esmero que nace muerto
No lo estoy logrando, pero qué sino hacer
Si se me puso este planeta en la cabeza
Y este sendero se estacionó bajo mis pies
Y salió mi cuerpo tambaleándose bajo la idea de tí
Y la luna al unísono orbitando alrededor
Se clamó un verso de lo más centrípeto
Oh, lunita carcomida, cuándo seré parte de tus emociones
Cuándo ocurrirá tu clavo de color castaño
Cuándo predicaré la muerte, al loco emisario y su corresponsalía
Y aunque bravo es mi destino y graves mis desiertos
Me junté con mil motivos
E hicimos el amor
Pero nadie es más atleta que el podio
Me cae una hoja y es un argumento del invierno
Y me dice bienvenido, inspector de soledades
Aquí agujereate las nalgas con un tornillo que estarás sentado hasta recuperarte
Pero el final del túnel está años luz
Años sin luz de final de túnel
Si de robarnos tiempo se trata, este ladrón es titiritero
De la aguja del minuto y de la del segundero
El alma robótica de todo desencuentro
Todo lapso encapsulado en misión fría e inhumana
Gestante de olvidos y secuencias desarmadas
Como un fletero de una memoria inalcanzable
Como antídoto obvio para serpiente inesperada
O veneno sorpresivo de la esperanza previsible
Cuántos volantes que sobraron de tanta propaganda rehusada
Me despiden los infartos de mis dedos al calzarse los anillos de sus retos
Y mi contienda desenfrena y masca bemoles en abundancia
De silueta en silueta fustigando alfajores y caramelos
Ay si la desgracia no me tocara, ¡pobre de ella!
No podría cometer cumplidos
O al menos moriría entre sus manos
Ella agarrada de mi pelo
Yo bajo su muscular asalto
Enorgullecer de muerto es un poema viejo
Achatado entonces por erosión de un añejo viento
Que ciega él y enceguece al resto
Y en su recorrido silba todas las flautas
Ese es su trato con el mundo
Eso hará en su rato por el mundo
Disparando éter con el cañón de la inocencia
Y yo mientras seguiré aquí
Postrado pero presente sobre mis piernas más hábiles
Las dos enteras puntas de mi cuerpo
he de ser una astilla incómoda en la piel del universo
De esto estoy hablando mientras no acariciamos los musgos
De loas, de acrobacias o leones enjaulados
De pitufos y sirenas o caminos arraigados
De jugar a la serenata o vestirse de corsario
De que este metegol de la suerte está mufado
Para patearme el cerebelo vale molinete
Si me meten la pelota es de arquero y vale doble
Y si meto yo pega dentro y vuelve
Pega dentro y vuelve
Soy el hijo de la pavota
Pero amigo de la poesía que vertía de su boca

Resumiendo
Sí, tus ojos me dan fiebre
Comenzaré a traficar termómetros
Para nunca dejar de verlos
Y que me acaricies con ellos
Con tus miradas al pasar
Un puntiagudo instante de colisión
De una luz de túnel
Y un caparazón

viernes, 29 de junio de 2018

Distorsivo

Me digo a mi:
Pisaste caca
Me da la sensación
De que un sorete
Todo lloroso
Todo nocturno
Yace bajo tus pies

Me digo a mi:
El sol está abajo mío
Y si el sol está
Por qué este estiércol no habría de estarlo
No necesito vínculos decorativos
Para mi llanto atardecer
Sólo presiento que mi cuerpo se hace humano
Y con él
Mi pie también

Me digo a vos:
Me equivoqué con vos
De forma indeleble
Y al indeleble se lo intenta borrar con alcohol
Pero el alcohol sólo borronea la equivocación
La esparce
La expande
Y se nota para siempre

sábado, 16 de junio de 2018

Con toda la furia

No pudiendo despertarme, me acosté
Me saltaron todos los perros que atestiguaban esa plaza
Me quise ver recorriendo el país de tu cintura
La bravura roja de tus miradas
Pero esa intención quedó nonata
Queríamos estar contentos
Pero nos podíamos despertar

Nos susurramos adentro de un silencio incómodo:
El amor es lo único que se gasta cuando no lo usás
Nos susurramos bajo la sombra de aquella manta otoñal
Pero sin decir nada

Había una palabra sobre tu boca pero tu lengua estaba adormecida, y mi oreja la imaginaba:
"Disparate"
Algún sentido de esa palabra se recostaba entre tus dientes.
Eso pensabas, pero no entendía yo, en qué sentido cuál...

Viré
Como un catastrófico científico atolondrado y requisándose todo
Mi voluntad, mi nacimiento, mi debilidad y mi punto muerte
Se me viene cayendo encima mi voluntad como un gran ropero de cenizas.
Lleno de peluquerías clausuradas y yo sobre mi cama desnudo y miedoso.
Y el ropero cayendo sobre mí y un fantasma susurrando.
"Hay que vaciar ese ropero.
Hay que vaciar ese ropero que cae, aunque sea tarde.
Aunque sea tarde, hay que vaciar y reparar ese ropero."

Nace en el turbio barrio de mi ansiedad
Y bajo la lluvia antedicha y acechante
Un barro donde el sigilo queda fuera y expulsado.
Apaisado yo como una hoja oficio
Y me abollo y me escribo una carta para vos
"El nervio ciático nos va a cagar la vida
O con toda la furia, develar la quietud de la inquietud
Como el segundo próximo, que es una amenaza de muerte"

"Qué color te gusta?" Me hubiese encantado preguntarte
"Me regodea el ámbar!" Habrías capaz dicho
"Me urge ámbarillarte entonces. Y urgir es un verbo raro." Habría contestado yo
"Con cuál mano posta harías tal movimiento? La que renuncie primero a su subjetividad de acariciante? la que profundizare antes los delirios de la extirpe pintora? La que estuviese tal vez más cerca del corazón? O la más y mejor conectada por sanguineoductos venales?" Por ahí seguiríamos, por ahí...

Pero no. Qué fútil fue lo inútil. Qué abecedario macabro es el que deja caer sus hojas de otoño ilegal como truculentas momias que recorren la vivienda mientras hay más soledad en el centímetro de tela que separa nuestros cuerpos desnudos, que en mi renombre o en el tuyo, o las palabras con ché del diccionario, cuyo significado figura en sí mismo, vaya complejidad la de su aurora, que sirva de metáfora para comprender que significar dignifica, y que lo que está al revés se burla de mí.

Una voz de cristal sobre mi voz inexacta.
No hay diamante, ni demonio en todo el mundo que pueda quitártelo.
De mirarte ya te veo deshilachar mi estoicismo
Subrepticiamente, emprender la dimensión de la infinidad sobre el contenido de mi cara
Me desprendo de mi contemporaneidad, de mi ahora, pues no tengo experiencia aniquilando, ni sé cómo reacciona toda la inmensidad ante la falta de razones
¿Me voy o no me voy?
¿Estoy dudando o sólo sacrificando mi traslado a la investigación tautológica?
Falsasionismo ven a mí! Soy sólo un difamante o el salvoconducto de la joda?
¡Inexacto todo!
No quiero ser niñero de la niña Muerte
No soy un símbolo alfanumérico
Tengo algo finito en mi dominio y vacío el otro bolsillo
¡Inexacto! ¡Inexacto! ¡Inexacto!
¡Somos los que detestamos esta injusticia a la que nos estamos encadenando!
¡Sí ya lo sé!
Pero sólo saberlo es insuficiente para apelar a la condena.
Exacto... exacto... exacto...