viernes, 22 de marzo de 2019

sálveme doctora, sálveme doctor

sin pegote la calcomanía
despdaza  las moléculas del aire
hincándose sobre todas
envolviéndose a sí misma
en la negritud del cosmos
mas no podía sino yo
con un esmero funcional
con un ente adaptativo
es mi asteroide correctivo,
que repleto de caos
y con gula de resortes
y con hambría del pendorcho
del interruptor interrumpido
avanzaba ante otrora
ante esa falta de época
y nos sucumbió de mentira

Tratar de trotar, y poder

Tratar de trotar, y poder
fue comparar un sueño ternero
fue el macizo suero de un galope
o la fatiga confundida
o un lamento en llamas

era el título del alborote
el revuelto revuelo
la audiencia sorda del hilo de la nada
la ciudad acurrucada
la ciudad acuchillada

cabezal, cabezal prepronderante!
un filo sin martillo
un golpe sin su hacha
una conjunción de arenas macabras

reflexiones abdominales
¿soy un gramo ilógico de polisemias
o me uno a su dulzura de avanzada?
No me demonicen, dijo el diablo,
Soy tu cóctel
El abuelo de un pájaro
El insecto que te picó
La picadura que te insectó

Así de linterna
Con el alma de perorata
Con los ganglios discernidos
Con el sufijo hecho histórico
¡Australopitecus eran los de antes!

Observame con la cara de tus ojos
Que me autorretraté enarbolando dos palmitos
Que me relamí y ahora no puedo ya yo
Que posé con mi rostro infrecuente
En un compendio de una escena
Y fue formidable la fragancia
De los erarios como lanzas
De gaviotas de antesalas

¿A quién le debemos nuestro respiro?
¿A quién le respiramos todo el tiempo?
Si los ademanes, además, de nuestra biología
Nos alquilan sus cosquillas
Y nos chiflan al oído
Vos, pedazo de misil,
Vos correte espacial

(
sin el agua arrinconada, ni con el absoluto absuleto
sin la acronimia del ablande
porque te ponés microscópica
como el monumento a la fiebre
como los desusos aledaños
que hubieron
)

viernes, 15 de marzo de 2019

Heriditas. Heridita no cuaja

Entrevistadxs entre nosotrxs
Existencia contra Existencia
¿Cuánto tengo yo de la tuya?
¿Cuánto fue la cantidad contada de vos?
De la misma montura fue el dios de la guerra
Ese solo sol que nos escoltaba las espaldas
Y en mis manos ese tumulto de dedos pintándose de verde entre las acumulaciones de pelo de todos los mechones de tu cabeza.
Avanzaban incontables terminaciones entre ese mundo de las ideas que no se peinan
Y rayaron mis uñas el meteoro y los metoritos
Y me expuse como la tentación de la primer gota de la primer lluvia del verano:
No cuaja la concupiscencia
Quiero que pensemos la pregunta
Que nos equivoquemos los desencuentros
Que nos asemos las asas
Que unos madrugantes vinieron del aire
Voraceando los alfileres de la madrugada
Los alfiles lloran en diagonal, es eso forzoso
Así como los cántaros del cúmulo del culminar
Así como mi estómago imaginando nueces
¿Vos sabías que tengo mente y me concentro?
Que he cometido aceite
Poseído cual Poseidón
Ahogándose en su vaso
Un vaso basado en un beso envasado
Como aceitunas de la victoria
Como esplendores espléndidos expelentes de
El hijo de la que te maldijo
Y sus poderes de paralelepípedo
La hija de rendija
Y su potencia de lectora obligatoria
En cambio,
Esto sucede en general:
La noche se viste de cuero
Se me autoriza una copa más