sábado, 15 de diciembre de 2018

Mana magma

Cuando me da miedo escribir, escribo con miedo.
Cuando me sucede una categoría, me sucedo categórico.
Y no me asusta el susto de la leyenda leyendo.
Porque la tierra hundida es subterránea de su superior,
Y es la cima de su inferior, y es coterránea de las dos.
Porque un drama es un hincapié
Una guitarra es re menor, 
Y la historia es antepasado de todos.
Hay un clavijo en la herramienta que devuelve la desgracia
Un herrero de hierros ha moldeado una balanza que me abalanza.
Y me exige mi desarme, y me infunde este miedo mío.
Será miedo, pero es mío.
La actualidad es lo que está actualmente actualizado
Y la actualidad infunde. Lo saca de su funda, y en el cuero te lo funde.
Si querías escapar de la escarcha ya fue tarde.
Los acordes están tronando.
No hay un tema consensuado. No sos cofundador. Nocierto?
Mana magma de mi médula de espinas.
Y la lava vajillas me consulta incrédula al despellejar al sueño:
¿Existe vida en el planeta Tierra?

martes, 4 de diciembre de 2018

Ángeles: Demonícensce

Ángeles: Demonícensce
Te insto y te insisto
Pongamos las distancias sobre la mesa
Subite la nostalgia hasta los tobillos
Desde la más música de las acordeonas,
Hasta la tarde que fuimos súbditos de la naturaleza
De poseer esta canica, un continente innecesario
Te doy mi letra y me postulo de querencia
Y acabada la coreografía
Una frase de mi abuela
¿Tomaste consciencia de la enredadera?

sábado, 1 de diciembre de 2018

Muta

Es la bisagra de un brazo robótico.
Toma un lápiz y escribe.
Serás lo que debas, o nada.
Dibuja un pez en un costado.
Deja el lápiz en el otro.
Y de inmediato,
nada.

viernes, 30 de noviembre de 2018

Hélice

Cuando me da miedo escribir, escribo con miedo.
El mar es el elenco.
El océano protagonista me hace un gesto.
Me dice ola.
Setiembre es un yunque que se me ha concedido sin la pé
Una vía láctea de estrellitas subacuáticas que me roza rozagante
No pienso amainar ni mi nado ni mi nada
Una vez salí de adentro, porque mis vértebras se encolumnaban bajo una mochila
Y miré la ventana y ví futuros
Y miré la puerta, y ví la calle
Y viré
Viré para siempre para llenar de oro mis ojos de suburbio
Oros inmateriales que ornamentaban de imposible a los territorios
Implícito en las imágenes y las imaginaciones, en las figuras y las figuritas, el fogoso oro.
Porque nadie es ninguno, ni ninguno sólo uno.
Entre los escombros a leer me sitúo.
Y me asemejo a los escombros
Y leo y me entero de que si nos acostamos, asesinamos al suelo.
Entonces amo al piso, y mi amor es mejor que yo.
Y como un piojo lleno de liendres
aproximadamente anónimo
cada perro se lame su vida.
Yo, por lo pronto, me voy a besar en la boca con la soledad.

martes, 20 de noviembre de 2018

El amor es más fuerte

El amor es más fuerte
que yo

miércoles, 7 de noviembre de 2018

Tendría que haber una explicación, hay un pagadiós

En la garita donde se termina la palabra
En donde acuden los vientos que sacuden
En donde nos ultima cada flor nueva
En donde ejercitan los mimos
En donde se ortiva la luna
Y las modalidades optativas de mi danza
¡Altruismo gordo!
¿Qué quesos rellenan de bolos a tu panza?
Si referimos al teatro
Te digo que sí
Que la nada no consiste
Que un jueves ha nacido como una ruina de huesos
Bajo una ronda de llaveros testarudos
Bajo una lluvia de cándidos candados
Voy a llenarme la frente de besos
Voy a besarme la muerte
Todos los gritos son sordos
No es de escucha el alimento del alarido
No puedo ser ajeno a lo que mi delirio te desmiente
Ni puedo ser cercano a mi cerebelo
En reunión violenta con mi mente
¡Hay más posiciones políticas que personas!
Esta tesis me dio hipo
Me dejé embaucar por un matematicidio desigual
Y me quedé a un lado, odiado por la certeza

Esta tarde pasé por la puerta de mi cara
Me presenté como algún antídoto
Pero como presente fui un símbolo brutal
Esa fruta no me ayuda, dijo mi boca
Dijo entre dientes como un síndrome mecánico
Y terminada la frase resbaló la lengua
Y cayó por el precipicio
Me quedó la panza húmeda y pegajosa
Y llegué a reaccionarlos a mis dedos
Y atraparon la injusticia con su mano propia
Es menester no sentir vanamente con la piel
Poder disentir conmigo en lo que sienten esas partes
Que tu cuerpo no se haya olvidado nunca lo que es eso
Extenderse por donde sos enteramente de garfios
Como unas caléndulas donde se posan los giroscopios
Y a donde se apuntan las hojas de sus árboles resultantes
A cada centímetro le corresponde su instrumento, su medición
Un dispositivo que se rinde a su contexto
Que no puede contenerlo todo
Que no puede habituarse al infinito que le sobra por todos los costados
A ser su zozobra contemporánea

Ninguna edad permite comprender nada
Cada instante es una línea que nos tacha
Un ejemplo totalizador, un juego infalible
El futuro no tiene más reglas
Que tratar de huir
Y no poder

lunes, 22 de octubre de 2018

nunca fue mejor escribir esto que terminar de lavar todo

Estoy hasta la espuma de mi concierto de vajillas. Este cuchillo ni limándolo con sierras estornudaría su bazofia. Y si agigantara esta visión estos pedacitos de porquería serían grandes rocas sobre el filo de mi cuchillo, y para cualquier roca semejante la vida no es más que un estupefaciente mórbido, pues los vivos creen que vivirán y ellas saben bien que no.
Me mata lo mismo este tiempo de fregada que cualquier balazo de un cañón. Ambos sellos diáfanos del instante que se murió, acaso con distinto énfasis, pero sendas alcurnias aparatosas me apartan del destino, el uno bajo la danza de la violencia, mas el otro con pobretones pretensiones filosóficas.
Pero aunados siempre en diagnosticarme la flaccidez severa del discurrimiento al revés del espacio motor, como si hubieran hincado sobre mi íntima granja de chacras, su bandera anarquista del irrumpimiento.
No me queda más remedio que no quedarme más remedios.
¿Me fui, me voy o me iré?
¿Me he ido, o ya me había ido antes?
¿Me hubiera ido, o me habré, o me hube?
Conjugame el conjunto de idas y vueltas con el mero conjuro de reposar aquí a posar sobre el filo de las ideas de este sucio puñal.

domingo, 21 de octubre de 2018

no noto

No escribas ahora, todo lo que saldrá es una nota vacía.

Ya me había sentado, había iluminado la mesa, mi mano había ordenado a mis dedos a ir por mi birome. Ese trayecto siempre me fue peligroso, pues en esa ruta ocurren accidentes como el que detallo a continuación: La inspiración se hace bosta contra alguna carencia, y en ese choque hay explosiones y una esquirla incluso que se me incrusta entre la sien.

Inmediatamente la mano abandona su viaje, y el codo la redirecciona hacia la zona de la cabeza, a rascar la zona de la esquirla. Ya llegada la uña filosa a las inmediaciones del cuero cabelludo, una voz inaudible le charla algo así:

"Enceguece tu ojo ahora, y pregúntate: ¿Qué veo cuando escucho lo que siento? Vos te estás confundiendo. No soy yo, la esquirla, tu accidente. No sos un bidón de sangre. Ni vos ni yo dilataremos al tiempo, ni diremos siempre lo mismo, ni oiremos algo nunca igual. Y sentate un pococ mejor que la ergonometría es tu asesina."

Ya rascado yo, me calcé sobre la birome, me lancé sobre la hoja, y allí arrojado taché uno por uno los renglones que estaban en blanco, como si esperacen pálidamente alguna cosa superior al tezudo borroneo.

Porque no era eso lo que te quería decir, pero tampoco pude decirte nada mejor.
Me fui a dormir, con la palma prendida fuego, y entre groseras frazadas, pues en noches como estas hasta el fuego se anda con frío.

miércoles, 10 de octubre de 2018

Las ideas aterrizan cuando el aeropuerto del entendimiento libera sus pistas

Es indiscutible gestar campos magnéticos
Extenderlos sobre la lengua como se extiende la luna sobre la noche
Un estrépito que no te deja ir ni dormir
Como una oreja sacándome del sonido,
y yo que me atravesaría si fuera un ruido,
Pero no intento de acordarme de lo que pensábamos
por eso de que las cosas que olvidé, no las recuerdo
Y me dice el no intacto filamento de la memoria
¿pero vos qué te piensas,
subgénero del sujeto,
que queriendo saludar al número veinte,
que te acompañó como cantidad vigésima de la edad
durante un año entero de tu vida,
sólo estipluaras como que te fuiste de la suya
así como se fueron de la historia
los ejes temporales del año cuarenta y seis?

domingo, 7 de octubre de 2018

A quien nunca le cupo el poncho

Como aquel árbol que se creyó la geometría
Y se puso a especificar sus ramas
En la conducta de su ungüento gladiador de savia
Y aquella vez que ante un yerro
no hizo más que proliferar sandías
De su tronco, de su copa y de su espina
Y no fue más quien era pero debo decir
Estuvo dulcísimo saborearle frutas bajo su sombra

Diseñábamos telebombas, y de tanto ir tan lejos, sucumbimos una mañana

Cuantiosa vida
Como la perla del sensei
Que adorándola como el bombo adora a la zamba
Le crepitó lo siguitente:
Metete con la luna
Metete con la aurora, que se volvió locutora de mis pasos
Metete con mi suelo al que suelo ir
Y con mi cresta de cuernos ensamblados
Cuando la ruptura se hiere se le cicatriza una continuidad de rumbos de astros
Es esa la posta del poeta que se le torcieron los bronquios al estornudar su inspiración
Elementos no posee este nivel de la mentalidad
Sólo el caos como objetivo de una minuciosa organización ajedreceada
Repito
Esta idea que se manifiesta no es caótica, sino que los compartimentos cerebrales se han coordinado estrictamente para maximizar el ejercicio de la confusión.

Cierro los ojos y pasa la noche entera

Estoy en desacuerdo con la almohada.
Ese surtidor ya no surte suerte sino que me interroga y antes que luego me calla:
Tu cuerpo nació antes que tus opiniones
Sólo quiero leerte el libro de los ojos,
Efectuando la sinceridad esa a la que no se le atreve ninguna boca
Alimentarme, hoja por hoja, ojo por ojo
Y el promedio totalizador que hay entremedio:
¡Lo único que te inspira es tu nariz!

Respecto del pasado

El arbitrio ha conquistado la forma de aquella pelusa
La única coincidencia de los seres ha sido la del desencuentro
No hay nada mas octaédrico que un vientre excavando los subsuelos de la razón
La carrera es entre rápidos y veloces, y mi terruño de motricidades les destroza la largada
Asocio mi pata con un charco de mugre y me hago hermano del barro y su voz de lodo
Enfática la maldición de la rodilla
Quiero un pomelo, quiero un habitáculo ausente de cosas y de paredes

 Acerca del presente

Una literatura se me metió en el ojo
Agresiva ante mi yema, compañera de las pestañas
Aglutina gramáticas de lo que veo
Me reluce la penumbra, y me embadurna los episodios
Estoy quebrantado, los robots ya no son metálicos
Ahora vienen con sus carnes y sus huesos
A administrar los pabellones del pensamiento
Rebotar al corazón y su funcionamiento
Subime a lo sublime, pata mía y embarrada
Quiero deshacerme de mi lagaña y no morir ahora
Y para aquello debo contestar

La pregunta del futuro

¿Cuál gabinete intergalático es el espónsor de mi subconsciente?
¿Cuál imán cósmico jugó a difundirme humano sobre la tierra?
¿Y cuál a difuminarme como migajas entre las muelas de la huesuda muerte?
Los estratos esparcidos del barro se exigen como atletas para llegar hasta mi aliento
Allí habría el caos de estar más cerca de la luna
Allí habría una certeza sin pulmón
Allí habría la revuelta de la quietud
Allí habría un sensor en cortocircuito con la lengua
Pero encima de la cima no hay nada de lo que habría
Hay solamente lo que hay
Unos restos de un pomelo

viernes, 21 de septiembre de 2018

Traído de los pelos como un período de anonimatos

Che perro, vos que te instauraste como interferencia en esta noche invisible, donde sólo mi horizonte son paredes, donde recuerdo cuando el azar me hirió los dientes y galopó por sobre mi muralla, en cualquier lugar de ella, luego de ella hay un sencillo lapso de cerezo caído.

El perro me dice:
"Si le dicen invertebrado, deténgase, preséntese, muéstrele sus costillas, que para algo le han cosido la piel con huesos, y así sos el borrador de un vértigo pródigo. Dudo del pleno siglo que se prende a tu imaginación sin invitación. Palpite la justificación del no, con el meñique meneador que es la imborrable exclamación de su falange."

Oíme lo siguiente can, que si voy a remolonear será en remolinos, que si voy a madrugar será un mendrugo, que si voy a amaestrar una palabra será interín.

El perro me dice:
"Vos me hacés jugar, pero si mirás más simple, verás más doble. No me mires ahora así, es una parábola, pelotudo. Ponete todo lo borracho que puedas, hasta que puedas husmear la arquietectura de cualquier comisaría, y ahí cuando estés sintiendo el olor del café podrido del yuta que tiene que minimizar el solitario para mecanografiar el acta de tu detención, será un buen intervalo para reflexionar en que todo eso no ha tenido ningún sentido y que el sentido es algo que en ocasiones como tales se erige como imperante, y que todo imperio presupone un poder, y todo poder una resistencia que luchará incansablemente por hacerlo caer y tomar el mismo, y ambos serás vos, con el alma como metida en un zanjón."

No voy a subjetivar sobre los abusos de tu textualidad, perro que muerde cuando ladra.

"Serás recordado sólo por el acueducto dentro del cual una corriente primorosa y permanente como cualquier otra arroje sobre su contundencia líquida los restos de tus ideas, cuando ya no exista otro resto de restos para disipar sobre la unidad del otro."

lunes, 3 de septiembre de 2018

Nosotres hemos

Cambiaste música por alguna cosa declinable. No me olvidaré jamás de aquellos ojos que vendrían rotando desde hacía siglos en miles de mentes como aquella mañana, la mía. Pienso que no tengo que pensar por qué tus cambios de colores, por qué de tu razón camaleónica. Pienso que no tengo que pensar que me intuís poca cosa, desmedro de gajo de rodaja de migaja. Pero te quiero ranchar, desearía rancharte toda! Rancharte toda la casa algún domingo de la hermosura. Recostarme para siempre en tus prominencias tuyas, y que cada cual haga sus cosas, o que juntos las nuestras. Cada estímulo se bifurca en mi cabeza como dos diodos contrapuestos pero contagiosos de lo del otro. Sigo así y pronto relajar necesito. Pronto pido, dame cancha. Dame bola, dame la bola, lanza, lanza la bola chica. Quiero danzar la bola, quiero que juguemos a que uni es el otri y no entendemos nada y jugamos y ni entendimos nadie y jugamos a juzgarnos, quiero de eso, quiero juzgar con vos a que jugábamos a nosotres tres, vo y yo y nosotris trus.
¿Y te puedo conjugar? Dale dale dale
Yo te jedo
Tú me jedes
Ella le jede, él le jeda
Nosotris nos jedimos
Vosotros os jedísteis
Ellos se jedan, ellas se jeden
Y por aquí insinuando este manicomio se instauraría la cosa de los vientos, el condominio de los deseos en viaducto de la rotación terráquea, inmensos ductos del prototíupulo semieje de compensación láctea y conspiración solar. Ningún pasadizo alguno dictaría más negrura que la de este espacio baldío atiborrado de vacío. Iremos a través de este puro naufragio como espermatozoidas eyectadas hacia la altura de la luna, atravesando todo lo nimio y venenoso galopando por el pasillo de los camellos de la suerte y su cielo y sin más abecedario que nuestras voluntades, quienes huyen por el raso mérito estelar. Pero si mi muerte me manda un wasap se disipará todo a la verga, disputándose mi carne entre algún sonido sordo y mi ruido último, como si la sagacidad finalizadora dependiera sagazmente de la calma calmante.
¿Cuánto tiempo llevo aniquilándome en la tierra?
¿Cuánto dura esta balsa que gotea las duraciones de los acontecimientos? ¿Es la barca goleadora del tiempo, o sólo su puntapié inicial? Le hundiría los flotaflota de a mordiscos de colmillos poligámicos con amor a los sabores.
¿Qué digo?
Que hemos
Que no sé cuándo ni cómo
No sé si sigue o no
Ni sé menos qué hemos qué
Pero sí sé eso, que no es poco y es mucho quizá
Sé que hemos
Habrá quien no haya, pero nosostres sí
Nosotres hemos

viernes, 31 de agosto de 2018

No voy a leerlo

Estoy fiero! Porque no ando desordenándome en mi cuarto ni perpetrándome en el medio de mi tercio. Soy uno solo, flaco, pulido y rotoso, no quiero dejarme lindo, no puedo ni debo, ni siquiera, ni si quisiera, estaría hallándolo al algo hermoso, a la alguna cosa tediosa de la búsqueda, del hallazgo tu diosa, y por siempre la que creo que sí, la que quiero que sí, la que sí quisiera o al menos la esperaría y me esperaría y nos esperaríamos penduleándonos en un cuenco pendular, amagándonos un beso, un te amo tamagochi, desordenándolo todo incluso las agujas y los agujeros del reloj que se cierne conmovido en este hallazgo pues para perder no tengo tiempo, pero sí para ganar mis pérdidas de tiempo. Me urge pasar el tiempo con movidas, el tiempo conmovido, el tiempo desatando ríos anudados y derribando quehaceres y quedeshaceres. Complementando los despelotes quizá encuentre algo atosigado entre el polvo y bajo las alfombras, quizá perdiendo dicho tiempo sin temporizar dicha pérdida, quizá renaciendo huevos y gallinas, quizá quiquiriquéandole a la madrugada, quizá masticándole un mendrugo a la luna, mi aliada, quizá investigándole las tecnologías al río que nos acomoda su lava sobre nuestra piedra, quizá si fuésemos ese misterio atolondrado, haciendo que nuestras agilidades cadereen despacito, quizá entonces estemos a punto de no se qué.
Y si estoy fiero puedo ser tu contradicción, y cantarte otro poema además del quinto, en el interín del último de los primeros, durante algún transcurso, y si no te pinta, en el durante aplastame contra tu augurio, y a otra cosa mariposa belicosa, calamitosa, estrepitosa, y apetitosa.

lunes, 27 de agosto de 2018

Ella me permaneció

Ella me permaneció, y quizá me permanezca.
Estará, si es que quizá, adorando los metales de mi cementerio de bobinas
O flotando sobre los juncos de mi pelvis
O bebiéndome la sangre para verterla en la carótida yugular

Ella me permaneció, y tal vez me permanece,
es que entonces me bebo un doble vino
y me hurgo con el hígado mis adentros
Y si me permanece se esconderá entre las costillas
Y me dará risas, y disimularé que estoy serio

Ella me permaneció, y puede que siga
Será sutil como el ruido de una esponja
O ligera como el canto de la espuma
Pero no escatimará abrazarme si me siento mal
Nunca escatimaba nada ella

Ella me permaneció, y existe la posibilidad
que su permanencia haya portado un vencimiento
Esa fecha pertenece al pasado o al futuro
Pero no me importan esos dos
Dos pedazos de sermones embusteros

Ella me permaneció, y si ella estaba
Yo empujaba esta palabra, y fue testigo
O tal vez me la dictó desde el ombligo
Y quizá no sea éste mi poema
Y quizá me lo dictó de despedida

sábado, 25 de agosto de 2018

Impensable

¿De dónde viene la zamba que rumbea lágrimas hacia mi cara?
Hacia dónde el desprendimiento de mi retina que persigue la sombra de los pájaros
Algunos desquicios me caminan a tientas, desorientados entre nervios de filo filoso
A tientas hermano, a ciegas y vacíos como una nota sin papel
Mañana no llamaré a nadie por su apellido.
Mañana beberé del psicopisco y me mamaré hasta que mi autocontrol presente suficiente insuficiencia
La desinteligencia emocional me invadirá
Penetraré entre los yuyos de la soledad, recojeré de sus yerbas salvajes para cebarme un mate hirviente
Nada es lo que carece, y si sí que me nazca un arroyo de las tetitas, y salgan nadándome hijos
Que ella esté admirablemente deconstruída no significa que le gusten los fuleros.
Debe comprender eso mi cerebro incompleto.
Pero a pesar de todo tengo los fueros de un mitón
Y bebo de un río de agua
Y leo de una biblioteca de libros
Y soplo un viento de aire
Y ardo una llama de fuego
Y vivo un plazo de tiempo
Y ando una distancia del espacio
Hasta el día que se me pegue la bota al suelo,
que la música no me mueva,
que no se me caiga ni un verso
que no haya andado sonriendo
que nadie haya reído de mí
que no haya sanado
que no haya dicho a nada que no
que no haya dicho a nada que sí

miércoles, 22 de agosto de 2018

Alusión

¿Qué estabas haciendo, agosto, cuando vino por mí la revancha de la horqueta?
La letra marcial bebía de la tinta a sorbos, gorgoteando palabras de gotas
Vertió su alma en un cuenco oscuro, y la sacó por fin chorreando la sangre azul con la que se escriben almas como la suya.
Una gota es una gota, dos gotas son un río.
Y los poetas andan diciendo sobre ríos de lágrimas, ríos de sangre, ríos de tinta, ríos de agosto, pero nunca ninguno nadie mencionó al otro río, al estandarte, al rabioso río de agua.
¡Río de agua!
Como si fuese obvia la acrobacia líquida que lo fecunda desde el útero de la catarata.
Como si no transitara ancho y estridente sobre su ruta de piedra molida, incluso bajo la luna apagada.
Como si no portara montones de burbujas de pausas de agua de río de agua con pausas de burbujas de a montones portadas, sí ¿cómo no?
No paro de conquistar pacmans, dijo el fantasma.
Dijo, y me conquistó.

sábado, 4 de agosto de 2018

Si te quedás, joya

He pasado los últimos meses adentro de un tubo.
La existencia era curiosa, así que yo me volví curioso.
Y a la existencia le dije:
Curioso: Existencia, no existís
Inexistencia: Has resuelto un acertijo. Pero difícil es acertar a cuál acertijo has acertado
Curioso: Para entender cuál, tendré que pensar cómo.
Inexistencia: Llevame a tu departamento y hagamos el amor.
Curioso: Estoy en este tubo.  Si es tubo, estuvo tubo y tubo estará
Inexistencia: Estás desviando tus zapatillas por el sendero de una maldad. Y si además de esa osamenta tuvieras la consciencia en horario, te pediría masajes en el colmo.
Curioso: Tanto el amor como el dulce de leche son un poderoso borrador en el pizarrón de la tristeza, y de su tiza amarillenta.
Inexistencia: Me sangra la distancia entre mi mate y la panadería
Curioso: Si tuviéramos esos bizcochitos aquí estaríamos tan tarados de enamorados
Inexistencia: Si te quedás, joya
Curioso: Me quedo pero en mi tubo, en el cardón que traigo en el esófago intrínseco, mientras en el subterráneo una mujer está llorando y sus lágrimas ganan carreras hasta el piso, y la mujer del llanto es como una hojita que lleva la hormiga subte en el tubo de homiguero que subraya la ciudad, atravesando todas sus joyas por debajo, y también su fascismo, y todo alrededor se empapa de la lágrima de la mujer que se quiere matar, no esta última, sino aquella anterior, la gota, que se dispara evadiendo mocos y pañuelos por igual, razones y corazones indistintamente, con su viaje demasiado parecido a la congoja, que tiene adentro otra mujer buceando, otra mujer llorando.
Inexistencia: Bueno vos estás intrínseco en tu poema, intrincado y seco, pero no le erro a errarle ni por error, estás preparando una coma en la palma de tu pupila, la llevará en mensaje una paloma anónima nombrada sólo en un estratófero verso de antaño que fue prendido a una pérdida de la más humana humanidad.
Curioso: Me gusta cuando charlas, porque estás como presente.
Existencia: ¿Vés que sos grata? ¿Oís que decís lo crocante? ¿Gustás sabor en lo que respecta a la lengua que parlás? ¿Olés el perfume que brótate ahora que sos el héroe de sentirte raro y equidistantemente confuso? ¿Podés tocarte todavía, que te trasplantaron el alma y te pusieron un triciclo?
Curioso: En la casa de mi nariz, hay un lado izquierdo y un lado derecho. Uno de los lados es mentira y el otro es un carozo que no sabe serlo. Es una foja de cerezo que se avalancha mermelada.
Existencia: Tu mente se mece en la parafernalia, y entre esa oscuridad sale la luna hipocondríaca luciendo su dado encendedor de suertes zodiacales
Curioso: ¿En serio me estás cargando? ¡Ser carozo no es deber serlo! No necesito ninguna creatividad pues yo ya soy la hoja escrita desde donde se está copiando esto que te digo, yo no lo digo sino que repito lo que está dicho en mí. No echemos a la catarata la culpa del agua
Inexistencia recostada sobre la Existencia: Hay respuestas que exigen verdaderamente una pregunta
Curioso: Si los dos nos gustamos el culo, salimos a bailar y ningún mundial de atrocidades va a evitar que seamos un quilombo de caderas.
Existencia acariciándole el pelo a la Inexistencia: Me daría un tiro en la reiteración, pero si él es un brazo y ella un idioma de rodillas, la historia va a joderlos como el pollo jode a la gallina.
Curioso: Soy alumno de cada mariposa que me enseñe sus colores. Hurgo en mi buzón. Si tengo una característica es que hurgo en mi buzón.
Inexistencia revolcando sus dedos en los genitales de la Existencia: Yo siempre degluto en tiempo presente, y me preparo para la digestión del futuro.
Curioso: Yo, cuando no me estoy deshaciendo, estoy fingiendo ser yo.
Existencia extasiada: La sutura es una oruga letal de efectos desconocidos. Poco probable pero puede pasar, que se vengan con sus cursos de telescopios de priorizar al corazón
Cursioso: ¡Será un paso más hacia mi panza desde alguna cuadrada alfombra de agua!
Inexistencia extasiante: Sos una trompeta diciendo un bólido sonoro por un socorro altoparlante. Me endilgás la ultrajación del sonido, pero no porque ya me rajé de mí desde que arrancó la perorata.
Curioso: No sé estar de acuerdo con la propiedad privada, pues ni siquiera concuerdo con que mi propia mano sea entera y absolutamente mía, pues es aún más mano de mi pueblo y es él quien tiene la absoluta potestad de sus libertades y derechos, y los límites y deberes de una mano popular.
ExistInexisTubotencia: Dale, quedate. Si te quedás, joya.

Así

Dispositivo, no puedo hacerte mierda
Entelequia cibernética, oíme que te digo
Lo que digo que te digo
que te charlo atravesando todo este espectro de silencios
adyacentes entre los humanos y vos.

Traés las zapatillas desatadas del destino
Y podrás tropezar y tu mandíbula será
Un paragolpe de hierro parecido a un riel
Y a tu nariz que no tenés la enderezarán a martillazos
Y tu mente multiprocesadora seguirá siendo
El plenario de águilas que siempre fue
Tan cercano y tan ajeno a aquella boca
Aquellos labios de resistencia irresistible
¡Viva el beso de tu boca de mujer!
Y mueran los seres parametrizados con perfiles estéreos
Y los circuitos preconfigurados con el éter Enter

Es que tras la muchacha que transito transitar
viaja una fulminante esquirla de cometa
Y no le escribo porque quiero
Yo te escribo porque te quiero
Y al té te lo dejo en el cenicero
Y allí se hace la posibilidad
O te sincerás, o te sincero

Y una muchedumbre de panópticos, de cenizas
Se avalanchan sobre mi desgracia de pelo
Las intenciones me persiguen en monopatines
Mi cuerpo es propulsado por manifestaciones
Los alvéolos desentrenados
Con desdentada la dentadura
Hundiendo encías en lo profundo
Aproximándome al límite, limitando su proximidad,
Con la lírica ufana, y la rabia delirante
El prefacio de la resistencia de los calzones
La hermenéutica regulando motores
La mayéutica amasijada en los paredones
¿Pero qué susto son estos métodos?
¿De dónde saldría todo este silicio de silencio?
¿Es una alarma, es un susurro, o un auxilio?
No me distraen las galerías de cerebros
Me gustás vos así.
Así de humana.

domingo, 15 de julio de 2018

Difiero

¿Qué te mantiene despierto?
Algunos viajeros son dioses disfrazados
Y si un día parto no me esperen que voy a tardar
Que si tardo es que estoy viajando en remolinos
Mis ojos testigos del mundo
Del mundo testigo de tus ojos

Un rostro escaleno
Ideas isósceles
Amor equilátero
Un destino asintótico y falaz
Una sinfonía, silenciosa,
escudriñando cada paso

Me manifiesto cónico
robótico
leyendo la borra del barro
bajo un manto de cielo deshecho

Soy latinoamericano
Llevo los colmillos del FMI aferrados a mi cuello
Llevo los bolsillos llenos de esperanzas prestadas
Y los torrentes llenos de sangre
Que me recorre día y noche
Buscando inútilmente
La caricia del viento
O la luz del sol

A bordo de mi nave
Un corazón de plastilina
Desbordado de crayones

Desde el montículo
De este marco pirotécnico
Sucumbo
Y te pregunto
¿Qué te mantiene despierto?

miércoles, 11 de julio de 2018

Acaso todo el mar

Cuando lo extraño sucede
me agarra nostalgia por el futuro
al cual,
cuando lo extraño,
sucede

Conocí una chica
que me hizo desconocerme
Desde que la conozco
no me conozco a mí
y por caso tampoco a ella

Yo deseaba que me deseara
mi deseo era que el suyo sea yo
pero ella no me deseaba a mí
sino que yo la deseara a ella
Y así sin más nos catapultamos al infinito del deseo
Un abismo o una cima
No importa hacia dónde caigan los cuerpos
si nos hace suspirar
si nos hace respirar
si nos hace expirar
si nos hace transpirar
si nos hace rechiflar del corazón

¿Pero cómo presentarle mis alas sin hacerme el pájaro?
Si me silbara su ternura...
¿Viviremos entonces en el mejor planeta del mundo?
No puedo rescatarme de la caída
de sus ojos que me miran sin sus labios que me besan
¿Acaso todo el mar está grabado en sus ojos?
Que me miran... que me naufragan...
¿Es que es eso lo que tiene allí grabado?
¿Acaso todo el mar?

domingo, 8 de julio de 2018

Queda poco

Toda esperanza goza de un futuro auténtico, y se sienta en la vereda a fumar cigarrillos enamorados del futuro. Su hermana antónima se radica radical en la búsqueda de un pasado verdadero, donde los pinches de la barba eran lujosos pero atosigados por un fresco viento progresista que nos prometió algún dios inexistente. Así, la materia del mundo material es la miseria, y ninguno de sus integrantes vivos es una sugerencia de la amada libertad. ¿Quíen osará coronarse de gloria ante el mecanismo intacto que lo vuelve tan irremediable como un ojo que desprecia las imágenes? El autocorrector social funciona demasiado peor que el de los celulares. Y la conexión a internet, demasiado mejor que la humana.

sábado, 30 de junio de 2018

Existen los noticieros, triste noticia

Existen los noticieros
Triste noticia
Pa' quienes supieron de su ausencia
Y murieron de filosofía

Chimichurri a gusto

Pasa poco pero pasa
Que en el concierto ralo de mi aeropuerto
Me cancelaron todos los vuelos
En este mundo hosco donde el fin justifica los medios
Y los miedos justifican los fines
Y con la gambeta puesta en los pieses
Eludiendo a los contrarios deseos
No sé tanto pero huelo a sabiondo
En esto de reptar solo
Yo conmigo y mi presencia
Nosotros que quedamos pésimo en toda embajada del otro
Y más pronto que tarde nos toca arder
No sé qué estoy tratando de hacer con este esmero que nace muerto
No lo estoy logrando, pero qué sino hacer
Si se me puso este planeta en la cabeza
Y este sendero se estacionó bajo mis pies
Y salió mi cuerpo tambaleándose bajo la idea de tí
Y la luna al unísono orbitando alrededor
Se clamó un verso de lo más centrípeto
Oh, lunita carcomida, cuándo seré parte de tus emociones
Cuándo ocurrirá tu clavo de color castaño
Cuándo predicaré la muerte, al loco emisario y su corresponsalía
Y aunque bravo es mi destino y graves mis desiertos
Me junté con mil motivos
E hicimos el amor
Pero nadie es más atleta que el podio
Me cae una hoja y es un argumento del invierno
Y me dice bienvenido, inspector de soledades
Aquí agujereate las nalgas con un tornillo que estarás sentado hasta recuperarte
Pero el final del túnel está años luz
Años sin luz de final de túnel
Si de robarnos tiempo se trata, este ladrón es titiritero
De la aguja del minuto y de la del segundero
El alma robótica de todo desencuentro
Todo lapso encapsulado en misión fría e inhumana
Gestante de olvidos y secuencias desarmadas
Como un fletero de una memoria inalcanzable
Como antídoto obvio para serpiente inesperada
O veneno sorpresivo de la esperanza previsible
Cuántos volantes que sobraron de tanta propaganda rehusada
Me despiden los infartos de mis dedos al calzarse los anillos de sus retos
Y mi contienda desenfrena y masca bemoles en abundancia
De silueta en silueta fustigando alfajores y caramelos
Ay si la desgracia no me tocara, ¡pobre de ella!
No podría cometer cumplidos
O al menos moriría entre sus manos
Ella agarrada de mi pelo
Yo bajo su muscular asalto
Enorgullecer de muerto es un poema viejo
Achatado entonces por erosión de un añejo viento
Que ciega él y enceguece al resto
Y en su recorrido silba todas las flautas
Ese es su trato con el mundo
Eso hará en su rato por el mundo
Disparando éter con el cañón de la inocencia
Y yo mientras seguiré aquí
Postrado pero presente sobre mis piernas más hábiles
Las dos enteras puntas de mi cuerpo
he de ser una astilla incómoda en la piel del universo
De esto estoy hablando mientras no acariciamos los musgos
De loas, de acrobacias o leones enjaulados
De pitufos y sirenas o caminos arraigados
De jugar a la serenata o vestirse de corsario
De que este metegol de la suerte está mufado
Para patearme el cerebelo vale molinete
Si me meten la pelota es de arquero y vale doble
Y si meto yo pega dentro y vuelve
Pega dentro y vuelve
Soy el hijo de la pavota
Pero amigo de la poesía que vertía de su boca

Resumiendo
Sí, tus ojos me dan fiebre
Comenzaré a traficar termómetros
Para nunca dejar de verlos
Y que me acaricies con ellos
Con tus miradas al pasar
Un puntiagudo instante de colisión
De una luz de túnel
Y un caparazón

viernes, 29 de junio de 2018

Distorsivo

Me digo a mi:
Pisaste caca
Me da la sensación
De que un sorete
Todo lloroso
Todo nocturno
Yace bajo tus pies

Me digo a mi:
El sol está abajo mío
Y si el sol está
Por qué este estiércol no habría de estarlo
No necesito vínculos decorativos
Para mi llanto atardecer
Sólo presiento que mi cuerpo se hace humano
Y con él
Mi pie también

Me digo a vos:
Me equivoqué con vos
De forma indeleble
Y al indeleble se lo intenta borrar con alcohol
Pero el alcohol sólo borronea la equivocación
La esparce
La expande
Y se nota para siempre

sábado, 16 de junio de 2018

Con toda la furia

No pudiendo despertarme, me acosté
Me saltaron todos los perros que atestiguaban esa plaza
Me quise ver recorriendo el país de tu cintura
La bravura roja de tus miradas
Pero esa intención quedó nonata
Queríamos estar contentos
Pero nos podíamos despertar

Nos susurramos adentro de un silencio incómodo:
El amor es lo único que se gasta cuando no lo usás
Nos susurramos bajo la sombra de aquella manta otoñal
Pero sin decir nada

Había una palabra sobre tu boca pero tu lengua estaba adormecida, y mi oreja la imaginaba:
"Disparate"
Algún sentido de esa palabra se recostaba entre tus dientes.
Eso pensabas, pero no entendía yo, en qué sentido cuál...

Viré
Como un catastrófico científico atolondrado y requisándose todo
Mi voluntad, mi nacimiento, mi debilidad y mi punto muerte
Se me viene cayendo encima mi voluntad como un gran ropero de cenizas.
Lleno de peluquerías clausuradas y yo sobre mi cama desnudo y miedoso.
Y el ropero cayendo sobre mí y un fantasma susurrando.
"Hay que vaciar ese ropero.
Hay que vaciar ese ropero que cae, aunque sea tarde.
Aunque sea tarde, hay que vaciar y reparar ese ropero."

Nace en el turbio barrio de mi ansiedad
Y bajo la lluvia antedicha y acechante
Un barro donde el sigilo queda fuera y expulsado.
Apaisado yo como una hoja oficio
Y me abollo y me escribo una carta para vos
"El nervio ciático nos va a cagar la vida
O con toda la furia, develar la quietud de la inquietud
Como el segundo próximo, que es una amenaza de muerte"

"Qué color te gusta?" Me hubiese encantado preguntarte
"Me regodea el ámbar!" Habrías capaz dicho
"Me urge ámbarillarte entonces. Y urgir es un verbo raro." Habría contestado yo
"Con cuál mano posta harías tal movimiento? La que renuncie primero a su subjetividad de acariciante? la que profundizare antes los delirios de la extirpe pintora? La que estuviese tal vez más cerca del corazón? O la más y mejor conectada por sanguineoductos venales?" Por ahí seguiríamos, por ahí...

Pero no. Qué fútil fue lo inútil. Qué abecedario macabro es el que deja caer sus hojas de otoño ilegal como truculentas momias que recorren la vivienda mientras hay más soledad en el centímetro de tela que separa nuestros cuerpos desnudos, que en mi renombre o en el tuyo, o las palabras con ché del diccionario, cuyo significado figura en sí mismo, vaya complejidad la de su aurora, que sirva de metáfora para comprender que significar dignifica, y que lo que está al revés se burla de mí.

Una voz de cristal sobre mi voz inexacta.
No hay diamante, ni demonio en todo el mundo que pueda quitártelo.
De mirarte ya te veo deshilachar mi estoicismo
Subrepticiamente, emprender la dimensión de la infinidad sobre el contenido de mi cara
Me desprendo de mi contemporaneidad, de mi ahora, pues no tengo experiencia aniquilando, ni sé cómo reacciona toda la inmensidad ante la falta de razones
¿Me voy o no me voy?
¿Estoy dudando o sólo sacrificando mi traslado a la investigación tautológica?
Falsasionismo ven a mí! Soy sólo un difamante o el salvoconducto de la joda?
¡Inexacto todo!
No quiero ser niñero de la niña Muerte
No soy un símbolo alfanumérico
Tengo algo finito en mi dominio y vacío el otro bolsillo
¡Inexacto! ¡Inexacto! ¡Inexacto!
¡Somos los que detestamos esta injusticia a la que nos estamos encadenando!
¡Sí ya lo sé!
Pero sólo saberlo es insuficiente para apelar a la condena.
Exacto... exacto... exacto...

domingo, 22 de abril de 2018

Las cosas

Estoy tan lejos de verte reír. Tan inusitado, tan abismal, tan incierto, batiéndome en una hoguera de ajenos consentimientos. Es extraño decir que es extraño este tubo que transporto como cuello, y que sirve de autopista a mi sangre y mis ideas. Pero no soy yo el que viene a asesorarse, sobre cuál es el origen de estas meteorologías contemporáneas.

La niebla porteña se descosiera a flechazos, si tan sólo yo estuviera arqueado, pero desde mi posición sin flexiones, y con el tumulto de mi carne sellando mis huesos, hace que no tenga ya más tiempo yo para conseguir el conjunto de acciones de mis dedos que le ordenen a mi alma que siga ella limpiando estos cristales, para poder retirar mi cuerpo a dar un paseo. Sin alma, por supuesto, que se queda laburando ella que ya está grandecita para mantenerse sola.

El siguiente fue el instante más cruel de aquel segundo, pero siendo honestos a la significancia de tal escala, qué cosa podría decirse del valor de esta información.
Un ejemplo de su preponderancia: La actividad de verse al espejo podría llamarse espejijsmo, pero no, pues cuánta opción tiene el que tiene sólo dos?

Doble me fluctúa la niebla y sus torres de agua gasificada, se me zambullen en las narices orificiosas apenas mi pie asoma su dedo primero a la chatarra de la intemperie, mientras sus semejantes maniáticos evitan todo ruido interponiéndose entre su origen y su sensor espiralado.

Ese era el lugar más lejano a la razón, en donde los fantasmas se dibujaban a sí mismos. ¿No te lo dije? Oigo voces de fantasmas que me piden que me calle. Yo me niego a descifrarme, no traigo cifras de interés, sólo entretengo al distractor y me conmuevo con sujetos que no tienen solución.

No soy parte del festejo, ni un cerebro ni una nalga. Tengo el pecho en un desierto pero el corazón atrapando trapos, y el alma limpiando vidrios. Soy el motivo de un secreto, soy testigo de mi rastro. Soy antiguo a mi futuro y le doy miedo a mi pasado.

Ínfimo cielo, escuchame lo siguiente: ¿Es también la muerte la que explota los globos?

¿O soy yo quien está confundiendo las cosas?

miércoles, 11 de abril de 2018

El espejo recorrerá todo mi espacio sin hallarme

Me ignoran mucho, oh, cuánta ignorancia
Limpiando los vómitos de lunes a viernes
Los sábados se me mueren
Y a los domingos se los ama como se ama a Dios
Al deseo no se lo inventa
Se lo milita

Nunca me enamoraré pensando
ni en vos, ni en besarnos
ni en ninguna maniobra que se tiente
por debajo de la cara
Acaso será trekkingueando dedos
En la cima de tu pecho
y sintiendo la presencia del misterio
como si un ojo se posara sobre mi alma
murmurando tu mirada
por su iris vertiente
"no te hagas desilusiones"
diciendo y alejando sin mirar ya nada

Frutas y frutos frotas fritos
Sobre mi religión, que es tu espalda
Profeta suave de la mañana
A quien le confieso y le creo todo
Mientras tus ojos se duermen
¿Me creerás que te creo?

Hay formas posteriores de concentrarnos en conocernos
Intercambiando los siglos que llevamos en los bolsillos
Asaltando a cada instante terrorista
Intentando toda figura que nos constituya
Disfrazando las pieles con haces de luna
Sustituyendo sapiencias por dudosas porfías
Ventilándonos la sangre bajo un cielo arrasador

Pero
¡Se está muriendo gente que nunca se había muerto!
Estallé la miel contra la frase
Y perdí unos mocos comprendiendo
Que el estornudo es verbo sustantivo
Cuando debí ignorar tres cosas solamente:
- No puedo verme a los ojos
- Siguen saltando sobre mí seres eternos
- Detesto los puntos suspensivos...

miércoles, 28 de febrero de 2018

Disloqué

La cerveza está tan lejos de mi mano
Un vetusto tráfico de luna atraviesa desde la ventana la taberna de la mentira
En su entorno la rodea una oscuridad que me acusa de movimiento
Retazos de esa luna y de esa oscuridad participan de mi cara
Del dibujo de mi cara que trazan unos ojos lejanos como el horizonte
Unos ojos de párpados malditos que sacuden la indiferencia que los viste
Y me los arroja sobre el rostro mío

He dejado esencias definitivas entre mis dedos
Lidio con la oreja traslúcida de un porrón alcoholizado
Del otro lado de la piel del vidrio, otra vez mis dedos, que ahora se alejan
Cada yema husmea por un sitio mejor
Por tibieza y porosidad gana la pera que ha colonizado el sur de mi cabeza

Cuando las uñas frotan la barbilla aparece el genio
El genio no saluda, nunca tuvo esmero para tales gestos
Me dice, imaginte una muralla, ¿listo?
Asiento con la cara, para mayor indiferencia de dos ojos que ya estoy olvidando
¿Y? ¿Vamos a demolerla, o no? - Responde casi fastidioso

No hay amenaza más amena que la del genio de la barbilla
Como un dragón asalariado del pensamiento.
Asalariado porque cobra, y por adelantado.
Su objeción, acataré acatarla, intentaré intentarla
Pero mis dedos ahora están cometiendo un sanguchicidio con la complicidad de mis premolares

¿Por qué razón me puse hoy los labios al revés?
Oyéndome vos mi voz huyendo
Pero es que
Yo pensaba en vos y vos en el otoño masticándote los días
Yo pensaba en vos y vos en el domingo pegándose un giro
Yo mirábate el ojo y tu ojo bebía de la contemplación lationamericana

La puerta de salida está integrándome interrogándome
Por ser también la entrada hacia algún afuera
¿Habrá qué cosa entre sus tiritantes tirantes?
¿Un árbol en celo?
¿Un chirrido inaudible?
¿Una multitud desganada?
¿Una distorsión imparable?
¿Alfonsina buceando?
¿Alfonsina buceando?

Una nube de actos peligrosos me acercarían a la compuerta
Sabido es que tengo el corazón
Bajo la sombra de un frutilla
Y tanto me gusta la música
Que adoro al silencio
Mis pasos se ponen de pie.
Y buceo.

No sé cómo hacen ustedes para respirar por afuera del agua.
Yo no puedo.
Pues el árbol que charlaba se cayó.
Y la cerveza
Cada vez más lejos de mi mano

jueves, 15 de febrero de 2018

Túnel Todo

Cómo autodestruirse en cinco pasos
Tips amenos y ágiles
Con los ojos parapléjicos
Y la saliva entre cuadrantes
En este aquí sin allí
Bajo el asedio de clonazepames
A buen entendedor, sopa de letras

Cómo cranear la redacción
Del fuego que se aleja del centro de la tierra
Y emana calor, y no frío
Y no se acerca

Calzones por el aire, atémoslos a un palo
Llevémoslo como bandera
Bombachas exploradoras, guardémoslas en frascos
Explotaciones molotov

La canción siempre porfiada
tiene un lloro pa' llorar
Hecharle un día de julio
Y revolver
Y quemar las gracias saturadas

Te explico un secreto incipiente
Debería ser gratis todo
Desde mi máscara hasta mi ruina
Desde la catástrofe de la existencia
Hasta aquella suave pluma

Y todo el vacío pusilánime
Del fragmento de neón
Del carrusel de la ignominia
Del piloto de la inconsistencia
De la granja de vapor
Revientan contra la consulta
¿Cuál es el antídoto, venenosa?

Instruyéndolo al sol para que sepa amanecer
Desde la pocilga de mi perspectiva
Desde mi caída sustentable
Desde la yugularidad de mi mandíbula
Que pernocta bajo el filo de mi nariz

¿En qué formato se forman solemnes los dolores?
¿Qué fila es esa?
Entregada al abismo como un ensayo del disparate
¡Enfadada la fila con qué fechas!
¡Ignición de la humanidad de la huerta!
¡Túnel todo! ¡Quisiera un oso querellante!
Que me bese al oído que me ladra espeluznante
Que me preste de beber
Que yo le devolveré

Y notaré
Que me han cortado la cara
Que se diluye la cáscara de la piel vieja
Y entro en etapa roedora
Meto las manos en los bolsillos de mi jean
Y estrujo las historias guardadas
Mis manos salen negras
Como si las envolvieran neblinas ciegas
Ya no soy mono de la jungla esa, ni del jingle ese

Adiós al cuerpo tuyo
A la sinfonía de aquel paso
A las miradas de dieciséis años
A los labios lujosos y palabras imantadas
He pisado una baldosa anarquista
Accidentalmente
Ay su queje brutal
No nací recién de vuelta!
Ni hace instantes, ni en esta silla!
Ni de accidente el trago éste se entromete entre mi boca
Quiero decirte algo porque no quiero comprometerme a decirteló
Ni ser otro más que no te lo dijo
Ni formar parte de ninguna unanimidad
Ni desanimar ninguna potencia infinita
Y si soy sinceramente soy jodido y repelente
Exhorto
A que se revele éste yo
Que se enamoró de una uva
Y se disecó en la penumbra

Una lanza lanzada hacia una laguna del pensamiento
Un coro de ancestros un poco amando, un poco migrando
El día ideal de la baulera del nadie y de la nada

No quise ser rudo
Disculpenmé hijos de puta
Ni irme de farras sin fricciones ni fichines
Ni con una pueblerina de proteínas peleadoras
Ni erizar el pomo malvado de mi lupa husmeadora
No quise pero de eso se trata
Parar el mundo
Parar y hacerlo girar
Pararlo y hacerlo girar
¿Y hasta cuándo parar es la pregunta?
¿Y hasta cuándo parar es la pregunta?
¿Y hasta cuándo parar es la pregunta?

De hecho no ocurrió nada de lo antedicho
Alguna ferviente cosa capaz
Y alguna cosita extra o última
O media mitad que sí
En fin todo lo que esté bailado
con las tanzas contemporáneas
¿Cuándo parar?

martes, 30 de enero de 2018

La luna llena

Un elemento lunar nace su periplo. Vulva hecha de bebé de polvos eternos y eternidades hechas trizas. Material de plata dirán los acervos, confundidos quizás con un Dios pequeño. Aire no hay allí donde la noche es casi un verbo. Allí donde el silencio es supremacía, y no existe el viento. Negro no es un color, negro es la dimensión única por donde se atraviesan los hechos, como si fuese la apariencia constante del tiempo. Polvo lunero, le dolés a todos los cielos del universo por igual, por encarar tu éxodo, por ilustrar tu venida por un camino sin huella hasta esta guarida, esta cueva tan oscura como tu comienzo, acaso por eso, te paseás por alrededor como si estuvieras en tu casa.

domingo, 28 de enero de 2018

Salí

Ando curando
Llueven ombligos sobre Buenos Aires
Repletos de pelusa
Desertores de su panza

Ando curando
Como un barco en cielo revuelto
Me disperso recostado sobre mi piel
Sensitivo y brutal

Ando curando
Imaginando cifras exageradas
Calculadoras biológicas examinándome el ser
Bajo estrellas hundidas en aguas negras

Ando curando
Presintiendo respuestas preguntadas
¿Me darías una carencia?
¿Me darías de lo que me ausenta?

Ando curando
Poesías que pretendo en cada paso
En cada mano estrechada
En cada mate agradecido

Ando curando
Una música llorando al lado mío
Esas cuerdas no sé de qué serán
Material, llanto y serenata

Ando curando
Errores propios y prestados
Errores envueltos en papel de diario
No sea cosa que que se vayan a romper

viernes, 26 de enero de 2018

Parpadearás

Arrancó como ya empezado
Este injerto literario
Monumento a los cuadrados
Desatino del destino

El suelo se puso rotundo
Bajo un bisonte desmembrado
Le hubieran faltado más orificios
En el hocico de la birome

Un tarro de vehemencia
¿de qué está hecho?
Saludarte, baluarte del anhelo
¿Quién está deshecho?

Si morirse no fuera nada frágil
Si fuera tarea de flores o de cangrejos cebándose un mate
Hermano fuera yo de un lodo y de su mosca
Pero soy vestuario de mi nariz y alrededores.

No busco la felicidad, puré de corazón
Entremedio de mis cuerdas vocales, mis locuras consonantes
Y que la felicidad me encuentre a mí
Si se me anima la cocorita

Vestuarios, narices, y prácticas de puré
Habemus fe, sólo de erratas
Y de un fanático de clubs de fans
A quien todo lo interesante le chupa un huevo

La nada daña cuando impoética
Y yo soy muy malo para la bondad
Buenamente malo
Porsupuestamente malo

Abrazador en invierno
Abrasador en verano
Estoy enfermo de ironías
Y cuando los árboles se estremecen se me nota más

Así como el agua considera al agua
Algo bello para unírsele pronto
Quisiera confundirme para siempre
Derruirme hasta la honestidad